General Julián Arístides Gonzáles mencionó a una alta funcionaria del Ministerio Público
Tegucigalpa. En abril de 2015, la prensa nacional informó sobre el asesinato del carnicero Francisco Rumualdo Calderón.
Diario La Tribuna tituló que los asesinos iban disfrazados de militares.
Todavía es una incógnita si la víctima es el mismo Francisco Rumualdo Calderón,apodado alias "Chicón", por la Policía y por la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN).
Fue enjuiciado desde 2004 por tráfico de drogas.
Y condenado el 30 de octubre de 2007, por el delito de tráfico de drogas, según consta en el expediente TST/FM/(9)985-05.
El 26 de marzo de 2008, la Corte Suprema de Justicia declaró sin lugar un recurso de Exhibición Personal a su favor.
La Corte Suprema confirmó la decisión de la Corte Primera de Apelaciones.
Su defensa alegaba que estaba bajo detención ilegal y había promovió el recurso el 7 de noviembre del año 2007, con el argumento de que la Sala Segunda del Tribunal de Sentencia de Tegucigalpa, de Francisco Morazán, lo envió a la cárcel aunque ya había cumplido el tiempo legal para la prisión preventiva.
En 2004, la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado y la DLCN lo detuvieron en la colonia Cerro Grande, lo señalaron como un presunto cabecilla de "narcomenudeo" en la capital de Honduras.
En ese entonces, el director de la DLCN, el general Julián Arístides Gonzáles, asesinado hace siete años, envió el oficio confidencial con registro D-DLCN-540-2004.
En el documento confidencial, se menciona el nombre de una servidora pública de la Fiscalía General de la República.
Este oficio fue enviado el 22 de octubre de 2004, por Gonzáles Irías al entonces fiscal general, Ovidio Navarro mientras investigaban el caso de Calderón. Cinco años más tarde, Gonzáles Irías fue asesinado por desconocidos.
Hasta hoy, permanece oculto el rumbo de las investigaciones que se originaron a partir de este oficio para desvirtuar o confirmar la información acerca del ejercicio de sus funciones por parte de una funcionaria pública y que sale a luz 12 años después de haberse originado.
Diario La Tribuna tituló que los asesinos iban disfrazados de militares.
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| Una de las notas de prensa, publicadas por diario El Heraldo, en 2004. |
Fue enjuiciado desde 2004 por tráfico de drogas.
Y condenado el 30 de octubre de 2007, por el delito de tráfico de drogas, según consta en el expediente TST/FM/(9)985-05.
El 26 de marzo de 2008, la Corte Suprema de Justicia declaró sin lugar un recurso de Exhibición Personal a su favor.
La Corte Suprema confirmó la decisión de la Corte Primera de Apelaciones.
Su defensa alegaba que estaba bajo detención ilegal y había promovió el recurso el 7 de noviembre del año 2007, con el argumento de que la Sala Segunda del Tribunal de Sentencia de Tegucigalpa, de Francisco Morazán, lo envió a la cárcel aunque ya había cumplido el tiempo legal para la prisión preventiva.
En 2004, la Fiscalía Especial contra el Crimen Organizado y la DLCN lo detuvieron en la colonia Cerro Grande, lo señalaron como un presunto cabecilla de "narcomenudeo" en la capital de Honduras.
En ese entonces, el director de la DLCN, el general Julián Arístides Gonzáles, asesinado hace siete años, envió el oficio confidencial con registro D-DLCN-540-2004.
En el documento confidencial, se menciona el nombre de una servidora pública de la Fiscalía General de la República.
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En el documento confidencial, se menciona el nombre de una servidora pública de la Fiscalía General de la República. En Honduras, la Fiscalía ejerce la acción penal pública. |
Hasta hoy, permanece oculto el rumbo de las investigaciones que se originaron a partir de este oficio para desvirtuar o confirmar la información acerca del ejercicio de sus funciones por parte de una funcionaria pública y que sale a luz 12 años después de haberse originado.
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| Organigrama del Ministerio Público. |
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